Educar para comprender las matemáticas o cualquier disciplina es una cosa, educar para la comprensión humana es otra; ahí se encuentra justamente la misión espiritual de la educación: enseñar la comprensión entre las personas como condición y garantía de la solidaridad intelectual y moral de la humanidad.
No seas de quienes tienen una carrera, sé de quienes tienen una vida.
El hombre es ese animal loco cuya locura ha inventado la razón
Las evidencias reconocidas no son tales necesariamente; sólo la mente no conforme discierne que las evidencias recibidas son ilusorias, y percibe evidencias respecto de las que la mayoría son ciegos
¿Nuestra civilización, modelo de desarrollo, no estará enferma de desarrollo?
Sobrevivir es distinto a vivir. Para vivir hay que jugarse la vida en ciertas condiciones
Creo que hay que tener conceptos flexibles, no encerrarse en tal o cual teoría o disciplina.
Mi propia vida alimenta mi pensamiento, que a su vez la lleva y la fortifica.
Yo me encuentro con los que me buscan.
Me gusta integrar el conocimiento de cosas diversas, me gusta enfrentarme con contradicciones, trabajaba dentro de la complejidad sin poseer la palabra, el concepto. E incluso, yo diría, sin tener la epistemología. Era espontáneo.
La palabra "complexus" significa "lo que va tejido junto", hay que ver los distintos aspectos de una misma realidad.
Soy un poco como una abeja que anda libando muchas flores, que ha recogido mucho néctar.
Cuando redacto, es a la vez una gestación. Las cosas van concretándose, y al redactar pienso, me transformo, cambio, miro nuevas fuentes.
La palabra ciencia significa "saber". Hoy en día al científico se le dice "usted tendrá un sector, será dueño de ese sector de tal forma que cuando un intruso quiera entrar, tendrá derecho a echarlo. Pero renuncie a la idea de comprender el mundo, renuncie a la idea de saber que usted, humano, está dentro de su sociedad, en este mundo." Lo que importa es labrarse un camino, y eso es la ciencia. El método es una rebelión contra esa cosa concebida como normal.
Osea, desde el punto de vista del etiquetaje, era terrorifico. No me podían clasificar en ninguna categoría reinante y dominante, y me trataban como un extravagante. Nadie creía en ello, nadie.
Estuve en una gran dispersión, tenía ganas de abrazar al mundo entero, devorarlo, pero fue el mundo el que me devoró.
Cual es el conocimiento que tenemos en la información, cual es la sabiduría que nosotros perdemos en el conocimiento, no sólo basta conocer, debemos integrar para un mínimo de sabiduría. Nos han enseñado que la vida es sólo obligación, pero hay una parte de la vida que es la poética; vivir, vivir la comunión, las emociones, la amistad, el amor. Hay que enseñar a vivir, no a sobrevivir.
Tener una visión global que tiene en cuenta lo local, relaciones entre lo general y lo particular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario